En Asador San Bernardo llevamos más de tres décadas dedicados a lo que mejor sabemos hacer: cocinar a la brasa y compartir momentos alrededor de la mesa.
Fundado en 1987, nuestro asador nació con un propósito claro: ofrecer a nuestros clientes el sabor auténtico de la cocina tradicional, elaborada con mimo, paciencia y el fuego como protagonista.



A lo largo de los años hemos crecido, modernizado nuestras instalaciones y ampliado nuestra carta, pero siempre manteniendo la esencia que nos caracteriza: el respeto por la materia prima, la pasión por la gastronomía y el trato cercano que convierte cada visita en una experiencia única.


Para nosotros, cada plato es una muestra de compromiso con la calidad y cada cliente, parte de la familia que hemos construido en torno al fuego.